Entrevista con Luis Bonilla en «La Otra Mirada Venezuela»

El pasado domingo 17 de junio participé en el programa “La Otra Mirada Venezuela”. En el cual converso sobre el congreso del PSUV, del cual debe surgir una dirección colectiva para continuar el legado del comandante Chávez. A continuación  el vídeo de la misma

Abordemos las Diferencias

Uno de los principios fundamentales de la unidad de los revolucionarios es la crítica y la autocrítica. Debemos sumar a lo anterior,  la resolución de las diferencias a través del debate de ideas. Es necesario repetir estas verdades porque todavía hay quienes no entienden que, lejos de quebrantar el accionar común, la diversidad de ideas enriquece la lucha si existe el clima necesario para procesarlas. En el caso del PSUV, el III Congreso actualmente en curso es prueba de que no vemos en las opiniones internas que disienten amenaza alguna, sino más bien una oportunidad para avanzar en las difíciles metas por lograr.

Uno de los mayores aciertos del liderazgo del presidente Chávez fue el de resumir en su discurso y acción la unidad de diversos factores que pujaban por el cambio social. Logró, como dijo Rosa Luxemburgo, “La unidad dentro de la diversidad”, sintetizando en el ideal bolivariano una corriente social que, a pesar de sus diferencias y a través de diversos caminos, pugnaban por cambiar el país. Entonces, no debe la derecha alborozarse cuando admitimos que hay diferencias entre los revolucionarios. Con la peculiar lógica disociada que los caracteriza interpretan justamente lo contrario de lo que se debe. A diferencia de ellos, no debatimos para cobrar deudas egoístas ni defender intereses particulares, sino para seguir afinando la unidad, corregir el rumbo en caso de desvíos y acelerar la marcha hacia el socialismo. Incluyo en lo que catalogo de la derecha, a alguno que otro que se hace llamar bolivariano y que de tal sólo se le nota la boina roja, mientras reproduce en la práctica los vicios que buscamos superar. Son estos últimos de los primeros que saltan cuando se asoman objeciones para enderezar lo que funciona mal.

Bueno advertir también sobre la crítica destructiva, aquella que no ofrece alternativas ni propuestas, sino que se consume en una especie de autoflagelación sin perspectiva de solución. Es una conducta malsana que obvia los importantes logros conquistados en estos 15 años, sin comprender que en todo camino -y más en uno inédito como el que protagonizamos- son imposibles de evitar los altibajos y errores.

¿Cuál es la manera adecuada de enfrentar las diferencias? Intentaré una respuesta: firmeza en las cosas principales, flexibilidad en las secundarias y en todas las demás tolerancia. Y ¿Cuáles son las cosas principales? La defensa férrea de la voluntad soberana del pueblo venezolano y el mandato del Presidente Chávez en elegir al compatriota Nicolás Maduro como Presidente. Seguir avanzando en la construcción de la sociedad socialista y, por ende,  hacia un mundo pluripolar donde desaparezcan los imperios. Transferir el poder al pueblo y a las bases, como condición sine qua non del socialismo del siglo XXI.

Bolívar y Chávez, llegaron a Europa

Las recientes elecciones europeas presagian importantes cambios en el panorama político. El ascenso vertiginoso de PODEMOS, un movimiento anticapitalista que tiene en la ola de integración bolivariana latinoamericana una de sus fuentes de inspiración, ha causado una auténtica tempestad en España y, por extensión, en el resto de los países de la Comunidad europea. A grandes problemas, grandes y radicales soluciones. El programa de PODEMOS es claro y simple: asamblea constituyente para conquistar la soberanía, control público sobre los sectores estratégicos de la economía; democratización de la gestión, ejecución y evaluación de la inversión pública a través de presupuestos participativos; garantía del derecho al conocimiento, la formación académica y una educación pública y gratuita participada democráticamente por todos los miembros de la comunidad educativa; garantía del derecho a una vivienda digna; potenciar la integración y cooperación entre los pueblos; impulso de la participación…

¿Nos resultan conocidas estas propuestas? El parecido con la esencia de la revolución bolivariana es mucho más que inspiración y mera coincidencia. Es la respuesta del pueblo español al capitalismo voraz que está asolando a toda Europa.

Dice el amigo Juan Carlos Monedero, uno de los principales impulsores de PODEMOS, en relación a España y Latinoamérica y las imposiciones neoliberales del FMI: «La conclusión es que al ser dos procesos similares tenemos que entender cuáles fueron las claves que llevaron a esos pueblos a enfrentarse con la marginación y con la miseria que conllevaba el modelo neoliberal

El ascenso de PODEMOS rebasa los límites españoles pues significa un camino a seguir para el resto de Europa. De allí que la derecha europea en su totalidad ya comenzó una brutal campaña internacional de criminalización de la nueva agrupación (al igual que la MUD contra el gobierno bolivariano durante las fenecidas guarimbas), lo que demuestra el pánico que genera en los sectores reaccionarios y, ¿por qué no decirlo?, a una respetable pero vetusta izquierda incapaz de presentar, de manera resuelta y audaz, alternativa alguna a la crisis que golpea sin cesar a las mayorías españolas.

Otro ejemplo europeo a observar es el de la izquierda griega, con la coalición SIRIZA a la cabeza, que avanza paulatinamente mientras la derecha, cómplice del capital transnacional, permanece inerme ante un aterrador derrumbe su economía. Para dar una idea de lo que sucede en Grecia, basta saber que en febrero del presente año, el desempleo en la población menor de 25 años llegó al 56,9%. Buen espejo para mirarnos, hacia allá nos quiere regresar la derecha venezolana.

Repito: a grandes problemas, grandes y radicales soluciones. Termino afirmando, que hoy más que nunca, el espíritu libertario de Bolívar y Chávez anda por el mundo liberado pueblos oprimidos.

 

¡Unidad y Lealtad!

La realidad es terca y persistente. Por más urgencias que la revolución apremie como importantes, la contradicción principal de la sociedad condiciona el accionar de las fuerzas revolucionarias. Así vemos por ejemplo, algunas experiencias revolucionarias, que pese a sus fracasos y traiciones, aceleraron el tiempo histórico, rumbo al socialismo, frustrándose a la vez, al no prevalecer el protagonismo del pueblo como factor forjador de su historia, la que generó. No obstante, las causas fundamentales de sus fenecimientos, está en la capacidad -tecnológica, mercantil, militar, mediática, cultural- de reproducirse del capital, en un contexto de hegemonía imperial.

Para materializar la independencia continental bolivariana por hacer, la contradicción principal es con el capitalismo, en su máxima expresión: los EE.UU.

Es cierto que el Comandante Chávez nos ha dicho: “Tenemos que asumir las fallas públicamente, es necesario asumir responsabilidades, eso hace un revolucionario”; pero también lo es que los países ALBA vivimos momentos decisivos de confrontación con el imperio. Eso es lo fundamental. Cuidemos la sagrada unidad y el liderazgo del Comandante de la revolución.

Usan al narcotraficante Makled para atacar a generales patriotas, extorsionan con una invasión para secuestrar al Presidente al “estilo Noriega”. La MUD chantajea con guarimbear en 15 estaciones del metro a la vez, y sus amos, desde Washington en “Cumbre de golpistas” y criminales, con prontuarios reconocidos, amenazan hasta con magnicidio, secundados por Zuloaga, prófugo lloricón de Globoterror.

¡Chávez es Socialismo! ¡Lealtad y Unidad Revolucionaria! ¡Movilización Popular!

3 R´s2: PSUV y Estado Comunal (II)

En la Declaración de Principios del PSUV, en el apartado 4, Del Estado capitalista burgués al Estado Socialista, se señala: (…) El partido debe tener por objetivo dar poder al pueblo organizado y consciente, socializando el poder político a través del ejercicio directo del poder de las masas (…) necesitamos sustituir el Estado capitalista burgués por un Estado Socialista. El nuevo Estado esbozado, avanza hacia el Estado comunal planificado y orgánico cuya concreción se da por la interacción dialéctica entre las viejas células organizativas, poco dinámicas y obsoletas y las nuevas formas organizativas superiores como las comunas, consejos comunales, consejos revolucionarios de trabajadores y trabajadoras, consejos revolucionarios de estudiantes, entre otros”. ¿Qué, cómo y dónde estamos haciendo algo para ello?

El partido debe tener por objetivo… avanzar hacia un Estado Comunal, donde el pueblo ejerza la democracia directa y la soberanía sin intermediarios, siendo decisor de las funciones ejecutivas, comunicacionales, contraloras y legisladoras que hegemonizan la sociedad. No se trata de erradicar, a fuerza de voluntarismos o radicalismo infantil, el añejo y colonial andamiaje burocrático, sino de rehacer, partiendo esencialmente de la participación popular organizada, un Estado que se conecte progresivamente con los grandes retos de la Revolución.

¿Cómo conciliar las viejas estructuras, como las Juntas Parroquiales y Concejos Municipales, con el surgimiento del Poder Popular producto de las Comunas en desarrollo?, ¿Porqué no hacemos un esfuerzo especial desde cada gobierno municipal de la revolución, y asumimos las Comunas como el espacio principal, prioritario y decisorio de gestión pública con el Poder Popular surgido de ellas?; desde el Estado y en el movimiento laboral, ¿cómo garantizamos el funcionamiento revolucionario y reivindicativo -justo y necesario-, de los trabajadores en sus sindicatos, conformando a la vez los Consejos de Trabajadoras(es) Revolucionarios (as)? ¡Eso sería avanzar hacia el Estado Comunal!

¿Porqué hacerlo? Es una obligación elemental en transición al socialismo, atendiendo el llamado del Comandante Chávez. Cito: Una y otra vez lo he dicho: la realidad territorial venezolana debe ser transformada y, por eso, la necesidad de configurar una nueva geometría del poder que se convierta en el reordenamiento popular, comunal y socialista de la geopolítica de la Nación”.

“Del tamaño del compromiso”

La reconstrucción y refundación de la República desde 1999, ha sido conducida por el Comandante Presidente Hugo Chávez con fiel implementación del Plan Nacional Simón Bolívar, 2007 – 2013.

Las últimas semanas han sido marcadas por iniciativas de reimpulso revolucionario, para consolidar la hegemonía bolivariana, en lo referente al nuevo Modelo Productivo Socialista, Geopolítica Internacional y forjar una Venezuela: Potencia Energética Mundial.

La última gira internacional del Comandante, ha tejido un andamiaje de relaciones y acuerdos trascendentes. La consolidación de acuerdos energéticos, incluyendo el área nuclear con Rusia, la incorporación de Siria al ALBA y la alianza estratégica con Irán, son avances significativos para la autodeterminación de los países del Sur, en geopolítica pluripolar; reafirmación concreta de nuestra independencia, fortaleciendo el Estado-Nación para las mayorías y con “rabieta imperial” vociferante.

Las nacionalizaciones y expropiaciones constitucionales, dispone de todas las capacidades productivas para alcanzar varios de los objetivos del Plan de la Nación. Las expropiaciones a prófugos banqueros, estafadores financieros e inmobiliarios, de Sidetur, la transnacional Owens Illinois y Agroisleña, son claro ejemplo del sentido y dirección de dichas medidas: Suprema Felicidad Social, Democracia Protagónica y Revolucionaria y Modelo Productivo Socialista. Las enfrentan lacayos restauradores que también chillan.

Al PSUV y movimiento popular corresponde la movilización nacional en defensa de estos avances imprescindibles para la nueva legalidad revolucionaria en construcción. Ese es el desafío, cumplamos.

Obvio, desarmados no es…

El Comandante Chávez, el 3 de octubre señaló: “Hay que acelerar la conformación de las milicias territoriales (…) claro que tienen que estar armadas. ¿QUIÉN HA VISTO UNA MILICIA SIN ARMAS? (…) Eso es una ridiculez, la milicia desarmada”.

Preocupa que revolucionarios descuiden, o no profundicen en esta RATIFICACIÓN DE LA ESTRATEGIA BOLIVARIANA, a la luz del incidente electoral reciente, como si quisiesen esconder, u “olvidándolo”, evitar lo inevitable, lo obvio: el grado e intensidad del conflicto entre la burguesía pitiyanqui que se esfuma “pataleando”, y la nueva legalidad popular en avance.

Olvidan ladinamente esta condición para la seguridad y defensa de la nación. No es casual que sea el tránsfuga Petkoff quien si resalta y editorializa con las declaraciones del Comandante Presidente, desvirtuándolas y alarmando con una verdad de Perogrullo.

El PSUV, en el “Libro Rojo”, señala: “…La defensa de la Revolución Bolivariana implica la defensa de la soberanía nacional, tarea que es responsabilidad fundamental del partido y el pueblo COMBINANDO TODAS LAS FORMAS DE LUCHA… ”, REIMPULSANDO así, los artículos constitucionales 130 y 326, que establecen claramente la corresponsabilidad entre el Estado y la sociedad civil en el ámbito militar.

La revolución implica la ruptura de todos los monopolios, también el de las armas. De no ser así; ¿cómo ejercer la corresponsabilidad?; ¿de qué modo, con la participación y el protagonismo del pueblo (también constitucionales), cumplir las obligaciones de la defensa?

A los Militantes del PSUV

No cabe duda en torno al balance de las lecciones que dejan las elecciones internas del PSUV, a lo interno del partido, en la nación y ante el mundo. Militamos en el partido más grade y democrático del planeta, ello se desprende de los resultados en la selección de candidatos a diputados para la AN, ante la próxima confrontación electoral en septiembre con la derecha pitiyanqui.

A lo interno del partido de la Revolución Bolivariana se demostró también lo correcto de la orientación: “me la juego con las bases”, otro acierto estratégico del líder de la Revolución Comandante Hugo Chávez en procura de la redención de los excluidos, con la construcción de la patria socialista.

Lección fundamental ha sido importancia de la unidad entre los factores de vanguardia de nuestro proceso durante y posteriormente a la jornada electoral, independientemente de algunas escuálidas opiniones estridentes que prefieren abultar la magnitud de cualquier incidente, ante su fracaso electoral, o el de los candidatos que el aupaba desde su poder burocrático o mediático, rumiando su orfandad política y/o carencia de respaldo popular, y haciéndole el juego a la matriz de opinión que pretende insuflar el imperio y su poder de terrorismo comunicacional mediático contra la Revolución, sus autoridades y su partido.

Estimamos que, al igual que en las deliberaciones de nuestro Congreso del PSUV, en el que derrotamos al “Chavismo sin Chávez”, y nos dimos una Declaración de Principios del Partido, los Estatutos del Partido y las Bases Programáticas, hoy todos debemos discutir y acordar una sola postura política y/o oferta electoral para, en este caso, tener un Programa Mínimo Parlamentario definido por:

1.- Defensa del liderazgo del Comandante Chávez (“con Chávez todo sin Chávez nada”).  

2.- Una AN expresión y síntesis del poder popular protagónico y participativo, haciendo unpueblo legislador, hacia el Parlamento Comunal.

3.- Conformar las Milicias Bolivarianas Socialistas, como expresión máxima de la unidad Fuerza Armada-Pueblo Bolivariano, para construir el “ejército de todo el pueblo”, ante las previsibles agresiones del enemigo imperialista y sus lacayos internos.

Ese Programa Mínimo Parlamentario, proponemos que se discuta, y apruebe, previamente al inicio de la campaña electoral de septiembre, en los cursos de Formación Teórica y Práctica que dirigirá nuestro Programa de Formación de Cuadros, conducido por nuestros compatriotas militantes Ricardo Menéndez y Jorge Arreaza, y en acuerdo con la Dirección Nacional del PSUV, debe ser de asistencia y aprobación obligatoria, para acceder a cargos de dirección nacional y regional, así como para ejercer cargos de elección, de principales y suplentes, de los militantes del partido.

Blindemos la AN

Frente a las realidades coyunturales de nuestra Revolución, la derecha y el imperio siguen activados con sus pretensiones carmonista fascistas, y continúan con su plan conspirativo, para garantizar la continuidad de su régimen expoliador y explotador de la gente y del país.

El pueblo y su vanguardia en la defensa de la Revolución y la Patria, que se materializó el 13 de abril del 2002, garantizando la democracia, el sentido popular profundo de participación y protagonismo, que rescató a su líder secuestrado, y que hoy articula, bajo el liderazgo indiscutible del Comandante Hugo Chávez, la formación de las Milicias Bolivarianas, son la garantía fundamental para la defensa de la patria ante las pretensiones de nuevas agresiones imperiales.

Es necesario resaltar lo que consideramos como tareas prioritarias hoy, de cara a las elecciones próximas de septiembre de 2010; al 2011, año de la definición de la nueva organización latinocaribeña sin USA ni Canadá y del 2012 año de la reelección de nuestro Comandante Hugo Chávez, tenemos que garantizar el BLINDAJE DE LA ASAMBLEA NACIONAL, con normas y principios partidarios compartidos y acatados por nuestros militantes y dirigentes, junto alPrograma Mínimo Parlamentario Obligatorio para la nueva AN.

Respuesta ideológica a Aporrea

Ante la campaña sistemática en Aporrea contra algunos dirigentes de nuestro partido, que ganaron el reconocimiento de su liderazgo en las elecciones internas del PSUV, necesario es aclarar:

  1. No estoy dispuesto ni pretendo caer en un debate personal sin argumentos políticos. Si se trata de una confrontación política en representación de alguien, les sugiero explicar de qué y/o de quienes son expresión y establezcamos: ¿de qué, la forma y los objetivos de esa intención?
  2. En torno a lo dicho en sus múltiples artículos en los que se me cita y ataca, no tengo nada más que agregar a lo referido en el artículo: “Los resultados de las internas del PSUV y `la súper-izquierda´ dentro del proceso”,  Luis Aponte. [2]

Sería éticamente deseable que los dueños de Aporrea vuelvan a poner en la página principal de su Web el artículo citado, ya que lo pusieron un solo día, e inexplicablemente los ataques contra mí salen todos los días.

A los camaradas que están realmente interesados en el debate de las ideas revolucionarias, y no en descalificaciones con argumentaciones en las que “sólo se puede observar idealismo metafísico (es decir, prejuicios pequeños burgueses) en contraposición de materialismo histórico y de dialéctica”[2], les recomiendo: busquen en la Web Aporrea, en el buscador de su página principal, en la parte superior a la izquierda, el artículo referido de Luis Aponte. Esa es una verdadera respuesta revolucionaria a los que tergiversan la realidad del exitoso proceso electoral de nuestro partido.

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1 Alí Rodríguez Araque.

Diciembre del 2006, La Habana. Cuba. 

2 Luis Aponte. Los resultados de las internas del PSUV y “la súper-izquierda” dentro del proceso.
Mayo del 2010, http://www.aporrea.org/actualidad/a100127.html  

Chávez las tiene locas y locos

Las escuálidas y escuálidos no hacen más que bramar que “ …Chávez tiene un pastel ideológico en la cabeza”, como lo afirmaban cuando expusimos el “Árbol de las tres raíces”, como ideario filosófico del Movimiento Bolivariano 200, liderado entonces -y ahora también- por nuestro Comandante Chávez, para la Construcción del Socialismo Bolivariano (también Robinsoniano y Zamorano).

Veamos porqué berrean y ladran tanto “Sancho”, con sólo III ejemplos:

I.- El camarada Comandante Chávez señaló el pasado domingo 14 de marzo del 2010, en sus Líneas: “Necesario es ir más allá del parlamentarismo social de calle: llegó la hora del protagonismo de la calle parlamentaria, del “pueblo legislador”, como lo llamaba Samuel Robinson. Recodando que estamos obligados a ir hacia la viva fuente del poder obediencial que desborda toda representatividad.

Cuando, ante los candidatos a diputados del Psuv de todo el país, en el Teatro Teresa Carreño, hizo referencia a que las comunidades debían sancionar sus «cartas comunales” como “normas de convivencia que se crean para la cooperación y el intercambio social, cultural, político y económico», avanzando así hacia la necesidad de construir lo que pudiese ser el «Parlamento Comunal», recordando que la soberanía reside en el pueblo, porque estamos en una democracia participativa y de protagonismo popular, en la que los diputados no pueden erigirse como los representantes de la soberanía popular.

Hay que recordar que los diputados de la AN son solo voceros del pueblo, como necesidad para establecer el «Parlamento Comunal» que podría aprobar los textos que posteriormente serían considerados por la Cámara de Diputados, como expresión de un “pueblo legislador”, dando concreción al pensamiento Robinsoniano.

Señala la ultraderecha en El Universal, el mismo 14 de marzo, que pudiésemos estar preparando el andamiaje legal que permita suprimir el Estado capitalista para imponer en su lugar el “Estado comunal que aún no ha sido levantado”.
Iguales señalamientos hacen con la Ley Orgánica de Participación y Poder Popular, Ley de los Consejos Comunales de 2006, la Ley Orgánica de Planificación Pública, la reforma de la Ley de Economía Popular y la Ley para las Comunas, instrumentos legales que pretenden fortalecer el poder popular junto a la nueva Ley Orgánica de los Consejos Comunales y la recientemente aprobada Ley del Consejo Federal de Gobierno (federalismo Zamorano).

Estos esfuerzos tienen como propósito el compromiso de los ciudadanos en la planificación, elaboración del presupuesto, la contraloría social y gobernabilidad de las comunidades, permitiendo al pueblo ejercer el poder en la forma más directa posible, conscientes de que las “comunas populares y socialistas”, están llamadas a ser las nuevas unidades político-territoriales del tejido social.

El periódico señala, como si con ello develara intenciones malsanas: “ …el chavismo avanza y para ello piensa apoyarse en el «Parlamento Comunal», que preparamos con las elecciones el 16 de mayo, en lo interno del Psuv, y el 26 de septiembre en todo el país, con la elección de diputados revolucionarios, dispuestos a construir y defender el Socialismo Bolivariano (Robinsoniano y Zamorano) que lidera el Comandante Chávez.

II.- Igual que en el caso anterior, los escuálidos(as) de la derecha interna, con la aquiescencia interna de los mismos V columnistas boliburgueses “revolucionarios ilustrados”, señalan que junto al Comandante Chávez, los Bolivarianos Socialistas tenemos un “pastel ideológico en la cabeza”, por una serie de atinadas estrategias internacionales, con las que la diplomacia venezolana comenzó a consolidarse como referencia fundamental del mundo pluripolar frente a los EUA, derrotando al imperio por primera vez, al rechazar la sugerencia del Presidente Chávez, de incluir en la redacción final de Québec, el concepto de democracia participativa, como meta para los pueblos de Nuestra América.

Entonces logramos la primera de las victorias diplomáticas internacionales, aislando a los Yanquis, al igual que lo hicimos en la última Cumbre de Cancún, cuando el Grupo de Rio, a propuesta también de Venezuela, aprobó crear una Organización independiente, sin USA y Canadá, que agrupase a los pueblos libertarios del continente Latino Americano y Caribeño, como aspiró Bolívar en el Congreso Anfictiónico de Panamá, hace 184 años, en 1826. Y como III ejemplo;

III.- Le damos importancia al “Árbol de las tres raíces” en la construcción del Socialismo Bolivariano realzando los principios éticos en la administración estatal, a ser sustituida por un estado Federal Democrático Participativo, como lo señalaran Simón Bolívar, Simón Rodríguez y Ezequiel Zamora, ya contemplado en la Constitución Bolivariana con la creación de cinco poderes públicos: Poder Ejecutivo, Poder Legislativo, Poder Judicial, Poder Electoral, Poder Ciudadano, y con el Proyecto Nacional “Simón Bolívar”, que se proponen romper la farsa representativa, para avanzar en la conquista de nuevos espacios como expresión de vida económico, social y cultural del Modelo de Sociedad Original.

Una ayudita a la oposición

Interesante como espectáculo la situación de la oposición venezolana. En las elecciones parlamentarias pasadas, apostando a la caída de la Revolución decidieron retirar sus candidatos, seguros como estaban del éxito de las conspiraciones en marcha, lo que supondría la fantasiosa posibilidad de unas nuevas elecciones a la Asamblea Nacional, en las que harían caída y mesa limpia. Mala decisión, perdieron un espacio de ejercicio democrático y tuvieron que conformarse con el show mediático.

Decidieron superar el resbalón y ahora 36 factores (sumando ONGs, partidos políticos y grupos de electores) debaten la mejor forma de escoger los candidatos a la Asamblea. Dos grandes tendencias podemos identificar. Por un lado, los residuos del puntofijismo, plantean utilizar encuestas y acuerdos cupulares a la manera tradicional; por otro, nuevos actores (y también algunos viejos) proponen elecciones por la base; sin maquinaria, apuestan a su proyección mediática. Ambos factores van rumbo al fracaso; la única visión de país que los mueve, su único proyecto en mente, es una Venezuela sin Chávez, posibilidad que el pueblo y la historia les negará una vez más en las máquinas de votación. Se nota, en el debate opositor, un entresijo absurdo de contradicciones: partidos tradicionales vs. “sociedad civil”, cúpulas vs. movimientos de base, la experiencia vs. las caras lindas, Mesa de unidad vs. Todos Unidos… ¡Una verdadera ensalada de protagonismo malsano y zancadillas disimuladas preparando los cañones para la elección presidencial del 2012!

Ni siquiera entre ellos hay debate con argumentos sólidos y razonables. ¿Algún programa o plan de gobierno más serio que la “tarjeta mi negra” del prófugo Rosales?.¿Alguna crítica certera para enmendar las metidas de pata?. ¡Nada!. Reto a los lectores a buscarle, al discurso rancio de la oposición, una sola razón digna de debatir. No la hay. En el fondo, persiste la mezquindad que por 40 años gobernó al país.

Señores de la oposición, queremos que representen en la Asamblea Nacional a los y las compatriotas que no comparten los ideales bolivarianos. El archipiélago de la contrarrevolución parece errar de nuevo; no nos queda más que ofrecerles una ayudita revolucionaria: podemos orientarlos en como se organizan unas elecciones por la base. Si bien no sabemos de acuerdos de cogollos, después de 10 años, somos expertos en acudir y respetar la soberanía electoral. Trece elecciones, nacionales y regionales, en los últimos diez años así lo demuestran.

Deseamos una oposición decente, inteligente y propositiva que, además de ser expresión genuina del los y las votantes y lejos de recurrir a las consignas antichavistas ya desgastadas o a la procacidad en contra del Presidente, nos adverse con inteligencia y altura, sumándose al debate por la Venezuela que queremos todos. Requerimos una oposición que se desmarque de los “cantos de ballena” del golpismo, que fije una posición soberana a la amenaza del paramilitarismo y las bases gringas en el país vecino. Venezuela es de todos, menos de los malos venezolanos, aquellos que entregan a la patria y conspiran a la sombra a costa de la paz y las vías democráticas. Dentro de la Constitución todo, fuera de la Constitución nada.

*Oído al tambor.

No solo el Comandante Chávez se pronuncia abiertamente contra las bases gringas en Colombia. También el Presidente Lula de Brasil y la Presidenta Cristina de Argentina, hicieron público su rechazo cuando, en declaración conjunta, esta semana expresaron sobre el plan de las bases que “es incompatible con los principios de respeto a la soberanía y la integridad territorial de los estados en la región”. Evo advierte sobre “otro Guantánamo” en América Latina.

Uribe, desafiando todas las señales que claman prudencia, dentro y fuera de Colombia, sigue obcecado en su manía belicosa. Estamos avisados.

Reiteramos el carácter pacífico de nuestra revolución pero también el deseo irrevocable de ser libres y soberanos.